viernes, 10 de octubre de 2025

trascendencia y tiempo (fragmento de un texto mayor)

 


Cuando nos interrogamos acerca del sentido de nuestra existencia, es necesario considerar no solo el hecho de poseer consciencia de nuestra existencia y de la necesidad de trascenderla, sino que esa trascendencia está delimitada por el factor tiempo.

Nacer y morir no son tan solo dos acontecimientos importantes, uno circunstancial y otro inevitable, a los dos les otorga sentido lo que acontece entre ambos acontecimientos.

Por eso el factor tiempo es determinante a la hora de resolver la pregunta acerca del sentido de la existencia.

¿Y es la racionalidad un problema? No, no es la racionalidad un problema, todo lo contrario, pero en nuestro tiempo, se considera que la razón está enfrentada a la metafísica.

Los errores de las instituciones religiosas, que han impedido el desarrollo y la evolución de sus doctrinas, a la par que ha crecido la capacidad humana para la comprensión de la realidad, ha creado el espacio necesario para que crezca una idea limitada acerca del sentido de la existencia, de modo que a la vez que los conocimientos científicos han ido dando explicación de la naturaleza y de la historia, las instituciones religiosas han mantenido a sus fieles encerrados en los límites de una fe cada vez más aislada de la sociedad y de la verdad objetiva.

De modo que lo metafísico ha quedado marginado; auto marginado más bien, y el triunfo del pensamiento científico se ha identificado como el único pensamiento racional posible.

Sin embargo, el uso de la razón; el razonamiento, para conocer la naturaleza de las cosas es la herramienta imprescindible para acceder a la verdad, tanto para conocer el funcionamiento de la naturaleza material como para conocer la verdad en relación con lo metafísico.

De manera que la evolución del pensamiento científico y la inmovilidad de las instituciones religiosas, han separado sin aparente conciliación, el pensamiento materialista y el pensamiento metafísico.

Mientras que esta separación exista, será imposible conocer la verdad completa.

El pensamiento racionalista, heredero de la ilustración y de ideologías como la socialista, el empirismo como forma de indagar y definir lo que es cierto o incierto en relación con la experiencia, limita a la humanidad a un estado de existencia temporal y limitado a sus sentidos físicos.

Aunque por otro lado, el empirismo aplicado a la experiencia espiritual es constructivo, la experiencia espiritual trascendente se torna en real cuando se realiza, se observa y ejecuta sobre el propio Ser.

Tanto la oración como la meditación, son actitudes empíricas, pues son formas de experimentación de la fe y de desarrollo de la misma.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Los comentarios estan moderados, serán publicados cuando sean aceptados, gracias